Pixies ha sido una de las bandas que más me ha influenciado para hacerme de más gustos musicales, esos duendecillos geek me complementaron con sus canciones alternativas punk-surf-noise y hasta pop que cantaban con letras alucinadas, muchas llenas de humor e irreverencia.
Por ahí de mis inicios en la prepa los conocí y fui poco a poco haciéndome de la discografía de ellos. En aquel entonces yo tenia un circulo de amistades un tanto freak, en especial mi amigo Poncho que en aquel entonces su índice de rareza sobrepasaba todo lo conocido para mi y junto con él me la pasaba escuchando buenas bandas alternativas como Sonic Youth,Smashing Pumpkins y otras cosas que ya no sonaban tanto como en los 90's, pero dentro de ese espacio para la música había un apartado especial para los Pixies que a los dos nos fascinaba escuchar canciones como la de "isla de encanta" y el solo escuchar a Frank Black gritoneando "hermanita ven conmigo, hay aviones cada hora, isla del encata me voy me voy me voy..." nos ponía de buen humor, en ese tiempo era un desahogo para nosotros compartir gustos musicales por que nuestros demás amigos eran punketos atolondrados con Rancid o Hard Coreros con cosas desagradables como SlipKnot y a pesar de que eran buenos amigos sus gustos musicales dejaban mucho que desear para mi y para Poncho que nos gustaban otras cosas que iban desde el buen alternativo noventero, rock pop ochentero, electrónica experimental, trip hop y hasta el indie tradicional.
Volviendo con los Pixies...
Según dicen Frank Black o Black Francis como se hacia llamar entonces era un tipo que gustaba escuchar mucho a los Beatles y Ramones pero también era aficionado de ver el cielo y sus estrellas, era un aficionado a la astronomía, todo un geek que voló hasta Australia para ver el cometa Halley pasar por ahí.
Bueno el caso es que este buen hombre regordete y con imagen anti-rock conoció a Joy Santiago en la universidad, después de esto decidieron unir fuerzas musicales y armar una banda de rock, Francis y Santiago para completar la banda dejaron anuncios en busca de un bajista y a este anuncio respondió la tan alocada y temperamental Kim Deal que en un principio intento llevara su gemela para la batería pero Kelley declino, así que Kim arrastró consigo a su amigo David Lovering , así empezó esta banda de Boston, y cuenta la leyenda que en sus inicios tocaban tan mal que varias veces los bajaron del escenario en tocadas, pero como muchos, los Pixies se dedicaron a pulir su sonido, tanto que hasta les llego el contrato con el mítico sello discográfico 4AD...
Pixies era una banda freak, no eran los típicos con la imagen de rockstars, ellos eran tan extraños que quizá es la principal cosa que llama la atención de ellos antes de escuchar su música; cuando recién salió su primer disco había canciones llenas de tristeza pero con el tiempo Pixies se fue dirigiendo a un camino donde sus piezas musicales llenaban mas el corazón de alegría, cargadas de comicidad por las cosas disparatadas que su vocalista repetía "vamos a jugar por la playa" y " This monkey's gone to heaven".
Los Pixies tienen discos excelentes que dejan a la posteridad, en lo personal El Surfer Rosa y Doolitle son lo mejor pero ya es de cada quien la opinión, por que hay tan buenas cosas de ellos, historias de ciencia ficción contadas con la voz de un Black Francis tan versátil y desordenado, canciones que a duras penas sobrepasan los 3 minutos (y eso ya termina siendo raro) pero pues a palabras del líder de los Pixies:
"Si una canción es buena, ha dicho lo esencial en noventa segundos; el resto es superfluo".
Pero como todo lo bueno tiene que terminar alguna vez, los Pixies murieron dejando un legado que ayudo a inspirar bandas como Nirvana (que hasta el mismo Kurt Cobain reconoció su gran influencia de los Pixies) y Placebo que ha incluido covers de la banda y hasta a invitado a Frank Black a tocar en algunos de sus conciertos.
Dentro de los albums de los Pixies hay canciones que no se tienen mas bien se deben escuchar, como:
-Debaser
-Monkey gone to heaven
-Gigantic
-Isla del Encanta, entre otras...
Que tan buenos momentos los Pixies me dejaron, una etapa que es como ellos: desordenada, freak y alucinada, aquellos 15 años que tenía fueron muy buenos siendo acompañada por estos 4 duendecillos surf que añadieron color y humor a esos días de mucho tiempo libre y sentimientos encontrados como los de todo buen adolescente.